Había caído mil veces y mil una se levantó, extendiendo sus manos al cielo, Dios lo ayudó. De día, detrás de las nubes veía el sol, de noche, las pequeñas estrellas en lo oscuro.
El drogadicto avanzando estando tentado, hasta poder dejar drogas y otros vicios. Del que hablo, creyó en Dios. Recuperó a su familia y el amor.
...Carta Para Un Drogadicto...
ResponderEliminarHabía caído mil veces y mil una se levantó,
extendiendo sus manos al cielo, Dios lo ayudó.
De día, detrás de las nubes veía el sol,
de noche, las pequeñas estrellas en lo oscuro.
El drogadicto avanzando estando tentado,
hasta poder dejar drogas y otros vicios.
Del que hablo, creyó en Dios.
Recuperó a su familia y el amor.